12 años, y no pensé que iba a doler
tanto?
martes, 16 de enero de 2024
viernes, 12 de enero de 2024
un arma blanca
hoy día es el primer día en días
hoy día es el primer día en que pude mirar por mi balcón. Santiago se veía blanco, extraño y difuminado. Brillaban las ventanas del edificio enorme que está a un par de cuadras, el elefante blanco. después de varios días sin salir, sin bañarme, durmiendo y comiendo y durmiendo y fumando, quise mirar y grabarme en la memoria el color de la luz reflejada en los ventanales. el atardecer es hermoso desde ese reflejo.
anochece, y la ciudad me mira en infinitas luces amarillas. sentí acabarse todo esto. me sentí peregrina. lejos de casa, que más que casa es una espalda tibia sobre la que llorar. me sentí llorar, sin espalda tibia sobre la que apoyarme. me sentí llorar un llanto viejo, y sentí palidecer las luces. dudé de las palabras, y de mí misma. pensé en mi amigo, acostado sobre su cama, con las piernas arrumbadas sobre la pared, con la única luz de una vela, y me escuché decir algo sobre este sentir, enorme, sin lugar para descansar. hay personas que no le temen al tamaño de este sentir. y me inundé de agradecimiento, y de propio temor. y lo sentí, mirando mi herida, y me sentí llorar una vez más. y dice algo, que da un giro, y siento calidez en mi pecho, y siento la pena más grande. una pena viva.
qué dolor, pensé. estoy enamorada de mi herida.